Valencia es todo o nada

El Gran Premio de Valencia se puede conventir en el más aburrido de toda la temporada o en el más emocionante. Todo depende de si se llega con los tres títulos decididos o queda alguno por decidir aún, como ocurre este año que va a ser un Gran Premio de infarto.

Moto2 ya tiene, desde el Gran Premio de Japón, nuevo y flamante campeón, Pol Espargaró. Pero en las categorías de Moto3 y MotoGP esta todo por decidir. Ambas categorias se juegan el Mundial en la última carrera.

En la categoría pequeña cualquiera de los tres favoritos, Maverick Viñales, Álex Rins o Luis Salom, puede llevarse el título y en MotoGP Marc Márquez tiene todas las papeletas para ser el Campeón del Mundo más joven de la historia, si no comete errores y Jorge Lorenzo no se lo impide.

Cuando comenzó el Mundial, un ya lejano 7 de abril, nadie podía imaginarse que llegaríamos a Cheste así. Por aquel entonces Maverick Viñales partía como favorito en Moto3, ya había luchado por el título el año anterior y parecía el más fuerte. Esperábamos sorpresas -es una de las mejores cosas de la categoría-, pero creo que nadie se podía imaginar que el Campeonato del Mundo sería un juego de tres, de tres pilotos españoles en concreto.

En Japón las caídas de Salom primero y Rins después, hicieron que Viñales se reenganchara al Mundial, dejando a los tres pilotos con una diferencia de 5 puntos lo que hace que en Valencia el ganador de la carrera será el nuevo Campeón del Mundo de Moto3.

Viñales tiene a su favor la experiencia del año pasado luchando por el título hasta las últimas carreras,  la madurez que ha demostrado durante todo el año -tras la espantada que protagonizó en pleno Gran Premio de Malasia en 2012- y el haberse encontrado casi por sorpresa con esta última oportunidad de conseguir el título.

Salom tiene como arma sus magníficos finales de carrera, remonta y aunque parezca que no es rival, aparece en las últimas cinco vueltas. Es un luchador y ha trabajado muy duro para conseguir estar donde esta ahora, aunque arrastra una lesión que puede jugar en su contra.

Por último está Rins, la sorpresa del año. Ya en 2012 demostró que era un piloto a tener en cuenta, y este año sorprendió a todos postulándose como candidato al título muy pronto. A su favor tiene su carácter. Es tranquilo y pausado y eso le puede facilitar pensar encima de la moto. Además su compañero de equipo Álex Márquez, también se ha unido a este grupo y eso le puede ayudar  en su labor.

Si la carrera de Moto3 va a ser de infarto, no va a ser menos la de MotoGP. Lorenzo partía como favorito defendiendo título y aunque se esperaba una gran actuación de Márquez, y ya deberíamos estar acostumbrados a que nos deje sin palabras, volvió a hacerlo al, no solo luchar, sino convertirse en favorito para el título.

Marc Márquez y Jorge Lorenzo. Jorge Lorenzo y Marc Márquez. Ambos se disputan el título el domingo en el circuito Ricardo Tormo. El primero tiene 4 Mundiales a sus espaldas -2 de 250cc y 2 de MotoGP-, ha aprendido a usar la calculadora, a tomar decisiones sobre la moto y no dejarse llevar. El segundo es muy joven, dice saber utilizar la calculadora pero le pueden las ganas, la energía. Tiene algo que muy pocos en la historia tienen y que le hace brillar.

El domingo tendrán que frenarle (si es que es posible) antes de salir a carrera y si no comete ningún error durante el fin de semana estaremos frente al Campeón del Mundo más joven de la historia, el mejor rookie y una leyenda del motociclismo; y si todo es perfecto Jorge Lorenzo solo podrá mirar.